El 1 de mayo de 2019, el Barcelona se enfrentó al Liverpool en el partido de ida de las semifinales de la Liga de Campeones. Este partido se disputó en el Camp Nou. Lionel Messi impresionó al mundo marcando un golazo. tiro libre contra la sólida defensa del Liverpool, demostrando por qué se le considera el "GOAT" de este deporte. Este partido demostró importancia de los tiros libres en este deporte.
La preparación del partido
El partido tenía mucho en juego, ya que el Barcelona alcanzaba la fase de Semifinales de la Liga de Campeones después de 5 años, tras su último Triunfo en la Liga de Campeones en 2015. Por otro lado, el Liverpool jugaba su segunda semifinal consecutiva, ya que fue subcampeón de la Liga de Campeones 2018-19.
Ambos equipos se encontraban en un gran momento de forma esta temporada: el Barcelona quería recuperar su gloria europea y el Liverpool perseguía su sexto título de Liga de Campeones. Jürgen Klopp. El choque estuvo lleno de emoción, ya que el choque entre ambos equipos fue una batalla de filosofías ofensivas, protagonizada por dos de los tríos más letales del fútbol.
Alineaciones
Ambos equipos afrontaron el partido con alineaciones potentes. El Barcelona, a las órdenes del técnico Ernesto Valverde, alineó al equipo de la siguiente manera: Marc-André ter Stegen empezó en la portería, la zaga del Barcelona estaba formada por Sergi Roberto en la derecha, Gerard Piqué y Clément Lenglet en el centro de la defensa, y Jordi Alba controlando la izquierda. El trío de centrocampistas para este partido fue Sergio Busquets en el CDM, Ivan Rakitić y Arturo Vidal. La delantera estaba formada por Lionel Messi, Luis Suárez y Philippe Coutinho.
El Liverpool estaba a las órdenes del alemán Jürgen Klopp, y en su alineación figuraban: Alisson Becker en la portería. El joven Trent Alexander-Arnold en el lateral derecho, Virgil van Dijk y Joel Matip como centrales, y Andrew Robertson en el izquierdo. Su trío de centrocampistas estaba formado por Fabinho, James Milner y Naby Keïta, con un trío atacante formado por Mohamed Salah, Sadio Mané y Georginio Wijnaldum.
El tiro libre
El Barcelona dominó el partido y se impuso por 3-0 en el Camp Nou. Durante la primera parte, el partido estuvo muy igualado, con ambos equipos luchando por la posesión del balón. El Liverpool creó ocasiones en la primera parte, pero no supo aprovecharlas. Luis Suárez, del Barcelona, abrió el marcador en el minuto 26 con un brillante remate a centro de Jordi Alba. Lionel Messi dobló la ventaja del Barcelona en la segunda parte al aprovechar un rechace de un disparo de Suárez que se estrelló en el larguero.
A los 82′ minutos del partido, Lionel Messi protagonizó uno de los momentos más icónicos de la historia del fútbol. El Barcelona ganó una falta a 30 metros de la portería y Messi se levantó para lanzarla. Con la mirada fija en la portería, Messi ejecutó un disparo perfecto que superó la barrera con velocidad y precisión, y se coló por la escuadra izquierda de la portería.
El Camp Nou estalló celebrando este momento icónico, todas las redes sociales hablaban de este gol. Este gol demostró el dominio del juego de Lionel Messi, reafirmando su estatus de "GOAT". Este gol también supuso el gol 600 de Messi con el Barcelona, añadiendo importancia histórica a su carrera dorada.